Una investigación de alto impacto, bautizada como "Operación Crypto-Agro", logró desarticular una sofisticada organización criminal dedicada a cometer estafas financieras a gran escala mediante la suplantación de identidad de empresarios y una compleja red de transferencias que utilizaba criptomonedas para eludir los controles.
La causa, que evidencia el avance de la criminalidad económica y digital, fue impulsada por el Departamento de Cibercrimen de Pergamino, liderado por el Dr. José María Cifuentes, y la Fiscalía N° 3, a cargo del Dr. Nelson Mastorchio.
Estafa millonaria
El caso se inició a partir de la denuncia de un empresario local de Pergamino. La víctima advirtió que terceros, utilizando fraudulentamente su identidad y datos personales, habían logrado gestionar un crédito millonario ante una entidad bancaria privada sin su conocimiento ni consentimiento.
A partir de este hecho, el Departamento de Cibercrimen activó una pesquisa especializada orientada a reconstruir el complejo entramado digital, financiero y logístico de los delincuentes.
Como resultado de la maniobra delictiva, la asociación ilícita había provocado una estafa total estimada en $1.6 billones de pesos utilizando mecanismos de ingeniería social, documentación apócrifa y herramientas tecnológicas para vulnerar los sistemas de validación y control.
Trazabilidad digital
Desde el inicio, la investigación desplegó una línea de trabajo sostenida basada en el análisis forense digital, la trazabilidad tecnológica y el cruce de información financiera. Este minucioso trabajo permitió identificar la existencia de una organización criminal estructurada, con roles definidos y la reiteración de maniobras similares en distintas jurisdicciones del país.
El alcance de la banda quedó expuesto en los allanamientos simultáneos realizados en múltiples puntos estratégicos, lo que ratificó la dimensión federal del delito: Entre los lugares donde se realizaron procedimientos se encuentran Puerto Madero, Rosario, Firmat, Colón Claypole, Ramos Mejía y Villa Luzuriaga.
Como resultado de estos procedimientos, cuatro integrantes de la banda fueron detenidos y se secuestró abundante material de interés que será sometido a peritajes técnicos especializados.
Coordinación interinstitucional
Los operativos requirieron una participación articulada de fuerzas federales y provinciales. Colaboraron el Departamento de Inteligencia contra el Crimen Organizado de la Policía Federal Argentina (a cargo del Crio. Inspector Carlos Javier Péndola), la Policía de Investigaciones de Santa Fe (con el Crio. Marcelo García al frente de la Brigada Operativa II – Distrito Rosario) y la División Unidad Operativa Federal Pergamino (bajo la conducción del Crio. Ezequiel Mazzollini), entre otros.
La exitosa Operación Crypto-Agro no solo desbarata una banda de ciberdelincuentes, sino que también pone en relieve el compromiso del Ministerio Público Fiscal con una política de persecución penal moderna, enfocada en la investigación de delitos complejos que afectan la seguridad jurídica y económica de la comunidad.
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